El aceite de argán es conocido como el “oro del desierto”, aunque algunos también afirman que es el “oro de la cosmética”.
El aceite de argán proviene del árbol de argán, un árbol endémico de los semi-desiertos de una parte de Marruecos. Con una longitud que puede llegar a los 10 metros de altura, se trata de un árbol de tronco rugoso y espinoso, con flores pequeñas que salen alrededor del mes de abril. Su fruto, de piel espesa y gruesa, rodea las semillas que, después, son tratadas para obtener su aceite. Y es que una vez se han secado podemos extraer el aceite.