Un dormitorio es una de las estancias más importantes del hogar, es donde descansamos, nos relajamos… es por eso que debe ser cómoda y seguro que nos gusta que tenga estilo.
Hoy vamos a darle ese estilo personalizado a esa habitación, con un antes y un después, es un habitación de campo en la que apenas entra luz, en la que con una mano de pintura, papel pintado, unos listones y cambiando las luces la hemos transformado en una gran habitación.
La habitación, inicialmente, estaba pintada de un azul muy claro, y algunos de los muebles ya habían sido pintados con anterioridad, aunque no todos.
Lo primero que hemos hecho ha sido pintar las paredes. Hemos empezado por la pintura, porque una de las paredes ibamos a empapelarla, así no hay miedo a manchar el papel.
La pintura elegida ha sido un blanco Nordic de la gama Econatura de Pinturas Monto. Que curiosamente fue elegido producto del año por su innovación y es que su pintura no huele nada, podemos incluso dormir el mismo día y cubre muy bien.
Esta pintura la podemos encontrar en
Bauhaus, es una pintura ecológica sin olor que podemos utilizar tanto para paredes como para techos.
Una vez pintadas las paredes, hemos comenzado a colocar el papel pintado. En este caso, tratándose de una habitación del campo, hemos elegido unos tonos verdes de bambú y plantas que nos ayudan a relajarnos.
El papel pintado es de
Photowall. Cuando adquirimos el papel pintado debemos de dar las medidas exactas de la pared a empapelar, y nos envían el papel acorde a esas medidas, la ventaja es que no hay nada de desperdicio, pues ya nos lo traen encuadrado.
Cuando ponemos papel pintado, hay que encolar muy bien la pared y al colocarlo siempre debe sobrar unos centímetros papel por arriba y por abajo, que luego recortaremos.
Una vez, ya hemos terminado de color el papel pintado, hemos comenzado con la cabecera de la cama. En la cabecera de la cama hemos hecho un medio revestimiento de friso de pino, mas o menos, metro y medio, dependiendo de la altura de la cama. En el friso hemos colocado las llaves de la lampara.
Seguidamente hemos terminado de pintar los muebles que nos faltaban con pintura Chalk Paint blanca de Pinturas Monto. Estas pinturas de efecto tiza para la restauración y decoración de muebles, las podemos encontrar en cualquier de las tiendas Pinturas Monto, además podemos crear efectos vintage, envejecidos o decapé.
Cuando se ha secado la pintura, aplicamos una cera protectora.
Al armario y las mesitas le hemos dado un toque personalizado con el papel pintado sobrante (hay que pedir unos metros de mas para poder hacer esto), así hemos aplicado papel pintado en las puertas de los armarios y en algunos de los cajones de las mesitas.
La Luz la hemos cambiado, hemos añadido un plafon de luz led de Onfuro que podemos encontrar en
Amazon y que da mucha más iluminación a la habitación.
