Escapada a Barcelona: Happy People Barcelona

Ya os dije que tenía pensada una escapada a Barcelona, así que este fin de semana la hemos puesto en práctica.

Salimos el viernes, nada más terminar el colegio, pues habían exámenes y además yo no soy partidaria de "pelarnos" un día de cole. Así que nada más terminar el colegio, nos pusimos a la marcha camino a Barcelona, unas tres horas y media desde Valencia.

Habíamos reservado un apartamento con Happy People Apartaments, a quince minutos de la Sagrada Familia, nos decidimos por el apartamento porque nos pareció una buena idea, estábamos en el centro, con todas las comodidades y a un buen precio.  

Al llegar nos sorprendió el edificio. Era un edificio con encanto, rehabilitado, no se cuando fue construido, pero imagino que principios del siglo XX, me encantaro el diseño de los pisos vistos desde bajo, pues me recordaba a las películas americanas.

 En una ocasión estuve en un apartahotel y la verdad no repetiré la experiencia, pues recuerdo que al entrar me vino un olor a grasa, que no podía ni prepararme la comida, es por ello que estaba un poco reacia al apartamento, pues tenía miedo de que me viniera ese aroma, sin embargo al abir la puerta del apartamento mis miedos desvanecieron. 

El apartamento era acogedor, moderno pero siempre manteniendo su estructura original. Estaba limpio y con todas las comodidades que te puedes encontrar en casa, microondas, lavavajillas, calefacción central, aire acondicionado, acceso wifi... Como vemos, lo ideal para pasar un fin de semana en familia y más aún si vas con niños pequeños.

El sábado cuando nos levantamos nos tocaba recorrido turístico, queríamos ver muchas cosas así que nos pusimos las zapatillas y a "patearnos" Barcelona.

Visitamos la Sagrada Familia, que como siempre estaba llena de visitantes, y camino de ella pudimos disfrutar de un mercadillo muy animado.

Después nos teníamos que pasar por las emblemáticas casas de Gaudi, y pasear por el Paseo gracias, sus gente, las tiendas y los turistas como nosotros.

Ya por la tarde, visitamos el Parque Güell, aunque mi hija me decía que le faltaban los columpios, pero le encantó la casa del guarda e incluso la de la tienda, pues parecía las casitas de chocolate de los cuentos.

Además pudimos disfrutar de las impresionantes vistas desde lo más alto del Parque, que dejaban ver toda Barcelona.

Como veis fue en día completo e intenso, pues aún nos dio tiempo a pasear por las Ramblas e incluso a disfrutar de la Sagrada Familia por la noche.

Y en cuanto llegamos al apartamento, como en casa, a terminar los deberes y ver un poco la tele. Y es que nos encontrábamos como en casa.

Si tenéis que visitar Barcelona, os lo recomiendo.

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